Pablo Milanés: "Es hora de guardar silencio sobre Cuba"

11 de Mayo del 2008

Pablo Milanés.

NÚRIA MARTORELL, El Periodico de Catalunya, BARCELONA

INTÉRPRETE DEL SENTIMIENTO
65 AÑOS N
ACIDO EN BAYAMO (CUBA)
AUTOR DE TEMAS COMO 'YO NO TE PIDO' Y 'YOLANDA'

--Llevaban cuatro años buscándose y por fin ha grabado con Chucho Valdés Más allá de todo.
--En este tiempo nos hemos cruzado muchas veces en escenarios, grabaciones de otros... Y siempre hablábamos de lo mismo. Nos llegamos a imponer el compromiso en el 2002 y empezamos a mandarnos obras de un país a otro, según iban nuestras giras. Y ni siquiera así pudo ser.

--Parece que entonces Valdés se cansó, grabó Canciones inéditas y logró un Grammy.
--Como antecedente no esta mal, ¿verdad?

--¿A parte del álbum, compartirán en el Palau hits de sus repertorios?
--Claro. Incluiremos canciones emblemáticas como Yolanda, Si ella me faltara alguna vez, Mírame bien, Para vivir y La felicidad, por ejemplo, que Valdés se lleva hacia el terreno del jazz con total soltura. Pero el feeling y la canción trovadoresca serán la marca fundamental del show.

--En Más allá de todo hay letras profundas y tristes y otras frívolas.
--Aspirábamos a que fuera algo sencillo. Pero el gran Chucho se pasó de la música cubana al barroco y al modernismo con absoluta impunidad. Y lo mismo pasó con las letras. Aunque desde el principio tuvimos claro que no era cuestión de abordar la temática de compromiso social que ha marcado mi carrera.

--¿Han tenido que hacerse muchas concesiones?
--Las posibles concesiones han sido de acuerdo a nuestros respectivos estilos. Y siempre con completo respeto y con la ética como principio. La voluntad ha sido y es de complacernos mutuamente. Y lo mejor es que con las músicas que él me enviaba me vi obligado a cantar melodías pianísticas que nunca creí capaz de abordar. Al no tener la tesitura de un crooner, lo veía imposible.

--Cuba no cesa de generar noticias. Y muchas sobre peticiones de liberar a los presos políticos.
--Sobre este tema yo siempre tuve mi opinión. Y, a diferencia de otros 29 intelectuales, me negué a firmar una carta de apoyo a los fusilamientos decretados, en marzo del 2003, contra tres cubanos que intentaron abandonar el país. También suscribieron la condena de largos años de prisión a 75 disidentes y opositores pacíficos. Ya entonces dije lo que tenía que decir. Y ahora, que algunos de estos presos están a punto de salir de la cárcel, son muchísimos los que cambian de postura.

--¿Puro oportunismo?
--Sí. Y pura cobardía. Por mi parte es hora de guardar silencio; de complacerme con lo que ocurre.

--¿Qué opina de esa generación de artistas que se erige como la sucesora de la vieja trova cubana?
--Nunca fui amigo de los términos. Ni fue nueva trova cubana. Ni mucho menos vieja. Ni ahora novísima. Digamos que es una tradición, como el cha-cha-cha o el bolero, que funciona y punto.

--Pero, ¿no tiene ganas de pasar el relevo? ¿Está ayudando a alguna joven promesa?
--Acabo de grabar con el joven Raúl Torres 16 canciones que, con el tiempo, espero que sean antológicas. Un disco bellísimo.

--El tiempo pasa / nos vamos poniendo viejos... ¿Algún consejo sobre cómo sobrellevar el pasado?
--El pasado hay que recordarlo con amor pero echárselo al hombro, aunque no en un saco atrás, en la espalda, con el que hay que cargar, sino como parte de las cosas que ya fueron y no volverán. Hay que entregarse al futuro, al presente, y vivir la vida plenamente, que es corta. La vida, como decía un poeta mexicano, es un pedacito de felicidad que nos regala la muerte.